Pintar una cajonera con la técnica del degradado
Los colores degradados o acabados ombré están de moda. Escoger un solo tono y aplicarlo disminuyendo paulatinamente su intensidad es una forma estupenda de renovar muebles. En este proyecto DIY te enseñamos a hacerlo con Annie Sloan Chalk Paint.
Materiales necesarios
- Annie Sloan Chalk PaintTM: colores Pure, Graphite y Provence
- Tiradores con placa y anilla de Mani Grip (Ferretería Ortiz)
Herramientas
- Serrucho de costilla
- Lijadora con lija de grano medio
- Brocha Nº12 de Annie Sloan
- Taladro atornillador
Renovar muebles de pino color miel
Los muebles de pino color miel fueron todo un éxito en los noventa. Camas, cajoneras, mesillas de noche, literas y cómodas poblaban los dormitorios, sobre todo infantiles y juveniles. Eran baratos y sólidos, pero con el tiempo pasaron de moda. Hoy día, su color intenso y su brillo ya no son tendencia: lo que impera ahora es el estilo nórdico, con acabados mates y suaves, y los muebles pintados. Annie Sloan Chalk Paint es la pintura ideal para renovar este tipo de muebles; hemos elegido la técnica del degradado u ombré para actualizar esta cajonera, con resultados ¡espectaculares!
1. Empezamos cubriendo el suelo con papel y serrando los pomos de madera. Estos tiradores están encolados; si los del mueble se pueden desatornillar, mucho mejor. Una vez serrados, pasaremos la lijadora con lija de grano medio para alisar. Retiramos los cajones y pintamos la estructura con el color Graphite. No es necesario lijar ni dar imprimación: basta con limpiar el mueble con un paño y alcohol de quemar.
2. Para obtener el acabado deseado necesitaremos un color (en este caso hemos elegido el Provence) y el blanco. Antes de abrir los envases, conviene mover bien el contenido para mezclarlo. Después hay que remover la pintura durante un rato. Pintamos el cajón inferior con el color puro; si una sola mano no cubre bien, se pueden aplicar dos. Es básico utilizar una brocha especial de la misma marca, que ofrece los mejores resultados.
3. Empezamos por el cajón inferior. Este cajón va pintado del color puro (Provence) sin mezclar con blanco. Los colores más oscuros deben ir en la parte inferior del mueble, ya que aportan peso visual. Para el resto, hay que mezclar la pintura así: en un bote vacío depositamos un poco del color puro y le añadimos un chorrito de blanco. Removemos bien y aplicamos la mezcla sobre el siguiente cajón. Poco a poco, vamos añadiendo blanco y pintando cajones.
4.Los tiradores son fundamentales para el cambio de look: hemos apostado por un modelo de estilo oriental de Ferretería Ortiz. Para colocarlos, presentamos la plaquita en el frontal y marcamos el orificio, que después taladraremos con una broca del diámetro del tornillo con el que se fijará el tirador. Cada vez que vayamos a taladrar, antes verificaremos que el agujero estará en línea con los del resto de los cajones.
5. El efecto que crea el acabado en suaves degradados azules en la estructura oscura es elegante y moderno. Los tiradores le aportan el toque diferencial. También podemos elegir tonos rojos o granates para un estilo aún más oriental. Los verdes y los naranjas, tan primaverales, crean muebles perfectos para habitaciones infantiles.
6. El resultado es impresionante, y lo mejor es que lo hemos conseguido en un solo día y con muy poco trabajo. La Chalk Paint se seca rápido, se limpia con agua y apenas desprende olor. Los muebles color miel pasan a la historia, pero no al contenedor: su estructura, elegante y sólida, ofrece muchas posibilidades para el reciclaje creativo