Cuando calienta el sol... Ponte a la sombra
Sol, solecito caliéntame un poquito... ¡pero no tanto! Todo el año esperando el verano para poder realizar actividades al aire libre y sin embargo la exposición directa al sol puede llegar a ser molesta y sobre todo perjudicial para nuestra salud ¡Pero que no cunda el pánico! hay muchas maneras de seguir disfrutando de la naturaleza y el aire libre bajo una sombra, protegidos del sol.
El sol fortalece los huesos, activa la circulación, equilibra el sistema nervioso y mejora el estado anímico pero también puede causar problemas graves en la piel. Toldos, sombrillas, techados nos dan sombra, protegen y resguardan del sol.
Hay muchas maneras de protegerse del sol que además resultan de lo más decorativas y agradables:
La sombrilla, un clásico
Las hay de colores, con formas geométricas, la clásica sombrilla de playa a rayas o preciosas sombrillas balinesas que además de dar una sombra enorme, son elegantes y muy decorativas.
Crea un ambiente romántico y chic y disfruta de una de esas comidas veraniegas que duran horas bajo la acogedora sombra de una sombrilla balinesa. Pintadas a mano, decoradas o de encaje. Son muy especiales.
Una lona estampada
Una simple estructura y una vistosa tela de algodón anclada a la arena con un para de vientos. Es cómoda, amplia y de lo más chic. En trails te enseñan como hacer estos pequeños refugios paso a paso. Elige una vistosa tela de colores y viste tu verano para disfrutar confortablemente frente al mar.
Un techado de bambú
Un clásico en lo que sombras se refiere. Recuerdos de infancia en el pueblo bajo un techado de paja o bambú que nos protegía del sol durante las horas de juego y las comidas familiares. Es económico, sencillo de instalar y da la mejor de las sombras.
Pasa un verano al fresco leyendo o descansando bajo la sombra. Hay opciones para todos los gustos ¡Elige la tuya!
Imágenes: Ludisound, Youtube, Improvisedlife, Gs