Consejos para adaptar tu casa al teletrabajo
En vista de que esta modalidad ha llegado para quedarse, hay que seguir mejorando esas nuevas zonas domésticas. Aumentar al máximo la comodidad en ellas, asegurarnos de que estén suficientemente aisladas…. ¿Cuáles son esos consejos infalibles para adaptar tu casa al teletrabajo? Éstos podrán ayudarte y ¡mucho! Para que seas productivo sin salir de casa.
Si tu vivienda es más bien grande, ¡estupendo!, el hecho de teletrabajar no supondrá un quebradero de cabeza porque lo más probable es que dispongas de un despacho o cuarto de estudio. Pero si no es así, o directamente vives en un apartamento, ¿cómo podría adaptarse a esta nueva necesidad?
Lo habitual es que pongamos el punto de mira en el salón, la cocina o el dormitorio. Precisamente este último espacio de la casa es el que mayor funcionalidad ha ganado en los últimos años. Y no lo decimos nosotros, si no el estudio “Life at Home” de Ikea. Éste asegura que cada vez se emplea más para realizar funciones que cuesta desarrollar en otras zonas, entre ellas las tareas intelectuales. Aquí van 6 consejos que te permitirán adaptar tu casa al teletrabajo, y si quieres dar un giro al estilo de tu hogar te encantaran las ideas molonas para decorar tu salón este otoño de este artículo.
En busca del lugar más tranquilo y cuanto más tecnológico mejor
Contar con el criterio de un profesional de la decoración a la hora de poner en práctica esta recomendación en tu propio hogar vale mucho. El interiorista Manuel Delgado del gigante sueco insiste en la idea de escoger el espacio menos ruidoso de la casa y, a ser posible, el mejor insonorizado. ¿Habías caído en este detalle? Favorecerá tu concentración y evitará que caigamos constantemente en distracciones. Eso sí, sin olvidarnos de que deberá estar preparado para ser un lugar muy tecnológico: tendrá que contar con una buena conexión a Internet y un surtido de enchufes cerca donde conectar los equipos.
La iluminación que te ayudará a concentrarte
La zona ideal donde teletrabajar no debe improvisarse, vale la pena repasar a fondo todos los espacios de la casa susceptibles de convertirse en ese despacho ideal. Desde luego el escogido debe garantizar una iluminación magnífica para el estudio, que favorezca la concentración y nos ahorre la irritación de ojos. Lo ideal es que reciba una adecuada fuente de luz natural que dure gran parte del día. Ahora bien, la iluminación similar a la luz del sol puede solventar esta carencia con muchas soluciones, como los flexos con brazo y pantalla regulables que funcionan con bombillas LED modulables en intensidad y tono de luz. Otro consejo infalible para adaptar tu casa al teletrabajo. Y si te rodeas de algún que otro elemento natural, conseguirás que ese espacio donde te sientas a diario sea un lugar más inspirador y sano.
La independencia justa y necesaria a salvo de miradas
La decoración puede ser una valiosa aliada para conseguir que tu espacio de trabajo en casa sea eso precisamente sin intentar que parezca otra cosa. Es muy importante diferenciarlo de algún modo del resto de la habitación con la que comparte metros cuadrados. Quizá una estantería modular y sin trasera, o un biombo chulo y customizado con tus habilidades DIY… Así el objetivo de adaptar tu casa al teletrabajo te beneficiará a ti y a los miembros que viven en ella, identificándolo como el lugar donde cumples con una jornada laboral día tras día y por lo tanto lo respeten como tal. Aparte de lograr que sea un ambiente más recogido e independiente.
¿Y los muebles? ¡Ergonómicos a más no poder!
No se concibe adaptar el hogar para el teletrabajo sin tener en cuenta los principios básicos de la ergonomía en ese mobiliario que será nuestro fiel compañero. Probablemente toque revisar a fondo qué piezas nos valen y cuáles no están funcionando como pensábamos en un primer momento. Ha llegado la hora de rodearse de esos muebles que te permitan adoptar posturas cómodas y así puedas mantener tu actividad y capacidad de concentración durante el tiempo que sea preciso. La silla es un elemento esencial para lograrlo, por tanto, vale la pena pensar en diseños con apoyo lumbar incorporado, asientos de altura regulable y funciones de reclinado. Tu mesa también puede ponértelo más fácil en este aspecto, adaptarse mejor a cómo pasas el tiempo durante la jornada: ¿más de pie que sentado? Apuesta por un modelo que puedas variar de posición y problema resuelto, podrás lograr que sea más alta o más baja según te convenga.
Los accesorios que no pueden faltar, ¡por supuesto!
En un rincón de trabajo como éste donde pasas una jornada laboral completa tampoco pueden faltar ciertos accesorios. En concreto ciertas soluciones inteligentes que te facilitarán la actividad sin que apenas seas consciente, sobre todo si se trata de una zona pequeña donde cada milímetro de espacio cuenta. Lo ideal es pensar en elementos que cumplan más de una función. ¿Sabías que hay flexos con cargador de móvil inalámbrico incorporado? Solo con poner tu dispositivo en la base se irá cargando mientras sigues escribiendo en el ordenador o contestando a una llamada urgente. Así no lo perderás de vista pero podrás olvidarte de sus dichosos cables y baterías.
Fotos: Ikea y Pressloft